lunes, 5 de octubre de 2020

Reseña #63: Legado en los huesos (Dolores Redondo)

 
Legado en los huesos | Trilogía del Baztán #2 | Dolores Redondo | Destino (Planeta) (2013) | Thriller | 560 páginas | 9788423347452
 
 
 
* Se trata de una segunda parte.
" Más emoción, más tensión, más revelaciones en la esperada segunda entrega de la trilogía del Baztán.
El juicio contra el padrastro de la joven Johana Márquez está a punto de comenzar. A él asiste una embarazada Amaia Salazar, la inspectora de la Policía Foral que un año atrás había resuelto los crímenes del llamado basajaun, que sembraron de terror el valle del Baztán. Amaia también había reunido las pruebas inculpatorias contra Jasón Medina, que imitando el modus operandi del basajaun había asesinado, violado y mutilado a Johana, la adolescente hija de su mujer. De pronto, el juez anuncia que el juicio debe cancelarse: el acusado acaba de suicidarse en los baños del juzgado. Ante la expectación y el enfado que la noticia provoca entre los asistentes, Amaia es reclamada por la policía: el acusado ha dejado una nota suicida dirigida a la inspectora, una nota que contiene un escueto e inquietante mensaje: «Tarttalo». Esa sola palabra que remite al personaje fabuloso del imaginario popular vasco destapará una trama terrorífica que envuelve a la inspectora hasta un trepidante final. "
  
 
   Legado en los huesos es la segunda parte de la Trilogía del Baztán, por lo que te aconsejo dos cosas: en primer lugar, si tienes pensado leer los libros pasa directamente al resumen final (abajo del todo) y en segundo lugar, lee la trilogía, por dios, merece mucho la pena (y lo digo a falta de leer el tercero)
Es cierto que el caso del que se ocupó Amaia Salazar, (inspectora jefa y protagonista) en la entrega anterior queda cerrado y ahora se enfrentará a otro caso. Pero su vida personal, familiar y su entorno en el pueblo sí que sigue una continuidad más marcada. Aunque, a decir verdad, uno de los asesinatos del caso Basajaun estará misteriosamente relacionado con el caso Tarttalo.
 
Algo que  me fascina de estas novelas es que cada caso está basado en una figura mitológica vasca, la autora entremezcla las leyendas y el ambiente que crea dicha figura con los asesinatos y su modus operandi. De esta forma hace mucho más atractiva, a mi parecer, la figura del asesino en serie. Si bien, en El guardián invisible, esa mitología daba pie a escenas de realismo mágico que en Legado en los huesos he echado en falta.
 
Amaia se verá envuelta en el nuevo caso de una forma que nadie esperaba, a raíz de uno de los asesinatos del caso Basajaun. Un nuevo asesino en serie que descaradamente reclama la atención de la protagonista. Ella, por su parte, se romperá la cabeza en mil pedazos intentando entender, relacionar, encontrar, hasta que al fin parece que ha encontrar el hilo de donde tirar... No quiero ahondar en esto, puesto que sería quitarle la magia al asunto. El caso del Tarttalo me ha parecido mucho más complejo que el anterior, más hilado, más oscuro, sin desmerecer al otro. La persona que está detrás de todos estos asesinatos parece tener muy bien organizados sus planes de actuación y muestra una fijación por nuestra protagonista, retándola, poniéndola constantemente a prueba...
 
 
Al igual que en el anterior habían capítulos intercalados que nos desvelaban cómo fue la infancia de Amaia, en este caso vamos a encontrarnos con capítulos que nos cuentan cómo fue el embarazo de Rosario, su madre, cuando Amaia estaba en su vientre. Si no sabéis nada de esta mujer, esto no os llamará la atención, pero resulta que es un personaje muy particular, nada común, que aporta mucha importancia a la trama. Me han encantado esos capítulos, se han ido esclareciendo algunas dudas del origen de su enfermedad, aunque todavía no hay nada claro. El pastel se terminará de descubrir en el último libro, o así lo espero.


"No hay miedo como el que ya conocimos un día y que permanecía inmóvil, respirando con un jadeo húmedo en algún lugar de nuestra mente. No hay miedo como el que produce la sola idea de que el miedo regrese."


La trama criminalística, con su respectivo asesino en serie y su entorno de investigación, es el grueso de la novela, pero la figura de Amaia como persona, a nivel individual, tiene un gran peso. La fatídica relación con su madre, los recuerdos de su infancia en Elizondo, donde ella nació y tuvo una infancia horrible, entre otras cosas, han hecho una mujer algo huraña, ruda, con muchos fantasmas, pesadillas... y el hecho de volver al pueblo para hacerse cargo del caso no ayuda mucho, todo lo contrario. Hay que conocer esa parte personal de la protagonista para entenderla en todos los campos, incluido el laboral.
 
En cuanto a personajes secundarios volvemos a encontrarnos con el subinspector Jonan, los inspectores Montes, Iriarte y Zabalza,  el doctor San Martín, su tía Engrasi, sus hermanas Flora y Ros, el pequeño Ibai, su marido James y otros personajes nuevos que van a ser clave para la investigación, como el juez Markina y el padre Sarasola.
 
La única pega que le pongo al libro es que el final se me ha hecho un pelín precipitado en comparación con el ritmo que llevaba el resto de la novela, es algo en lo que coincidimos la mayoría de integrantes de la LC. Pero no se puede negar que haya sido interesante, que me ha hecho sentir angustia y he sufrido por lo íntimamente implicada que está la protagonista con el caso. Los últimos acontecimientos van a dar mucho de qué hablar en el último libro de la trilogía, Ofrenda a la tormenta.

La novela está narrada en tercera persona y cuenta con un total de 42 capítulos y un glosario de algunas palabras vascas. El estilo de Dolores es una delicia, consigue transoprtarte a esos parajes del norte del país, donde el olor a tierra mojada y escabrosos asesinatos se entremezclan, mientras la lluvia y la humedad te cala hondo.


"No debería brillar el sol en los entierros, los hace más vivos, más brillantes e insoportables; la calidez de la luz sólo consigue mostrar el horror con toda la crueldad de una herida abierta."


   En resumen, Legado en los huesos es la segunda parte de la Trilogía del Baztán, en la que la inspectora Amaia regresa a Elizondo para hacerse cargo de un nuevo caso, tras el cual un asesino en serie la sigue muy de cerca... Mitología vasca, un modus operandi oscuro y muy bien hilado, tensión, sospechas, una gran investigación... Muy recomendable. Estoy deseando leer el desenlace de la trilogía.